Thursday, March 29, 2007

Mulholland Drive

Aú no he tenido el placer casi orgasmico de ver esta pelicula, pero esta escena me elimino del mundo, quede hecho talco, es muy buena.

Nadie nos va a devorar...


Mucha gente no hace ciertas cosas porque no encuentra una buena excusa para jutificar sus acciones.
Me pasa a menudo, solo que mi excusa es: porque se me dio la gana, y no pretendo descepcionar a nadie o darle en el gusto a nadie, supongo que quienes valen la pena no te cuestionaran por tus gustos.
Pero me siento culpable por buscar una excusa, supongo que nosotros mismos somos los unicos que podemos exigirnos una excusa de peso y real, y si te das cuenta de que lo haces, pues bueno, es cosa tu ya si te molesta y particularmente me molesta, porque no estoy en una libertad absoluta, del ambiente ni de mi. Es necesario sentirse libre, no puedo decir lo que quiera aunque no sea enserio. Si, sucede, mira en tu corazón, ahí está el tema.

Si lo piensas, tus dudas y temores son bastante colectivos, asi es que cuando logres dominarlos veras que eres muy superior al mundo.

Asi es que lo mejor es sentir que nadie nos va a devorar

Noche Purpura, mi Tierra de Nunca Jamas


Era una noche purpura a la cual Sally me hiso entrar, solo vestiamos nuestros huesos al viento, salimos de un cemeterio con unas veinte lápidas cubiertas de hierba y maleza, detras de nosotros se extendia un enorme bosque que con sus hechizos nos llamaba a explorar, pero sin poder entrar en sus fauses por la imbatible presencia de una maltrecha cerca de mohosa madera.
El cielo estaba lleno de estrellas, donde las nebulosas purpuras y azules se mezclaban bailando en el firmamento, la luna llena hacia plateada la visión. Una brisa fresca se levantaba y creaba la mejor noche que jamas haya visto y nos mostraba en un extenso claro que avanzaba en las afueras del cementerio, una enorme y antigua casa de madera un tanto descuidada, en cuyo techo el purpura se reflejaba pintando la mejor imagen vista por el hombre jamas. El claro era tan grande y extenso que nada mas se interponia en sus dominios a excepción del bosque el cual se podía apreciar en una vasta lejania.

Cuando salí del cementerio me encontraba vestido como siempre, solo que mi abrigo era largo y profundo como el cielo nocturno, por lo que me veia arrastrando una capa tan larga como el invierno y tan viva como la primavera. Aún estando hipnotizado por el ambiente, Sally tomó mi mano y no me dejó perderme por el conjuro nocturno. Ella vestía un abrigo similar al mío, solo que nunca tan exageradamente largo e interminable. Caí por el sueño en la alta hierba que crecía de manera salvaje en el suelo nocturno y grite en mis entrañas: "No quiero volver a despertar nunca jamás". Sally me abrazó y calidamente susurró en mi oido: "No nos iremos nunca y busca por mi en este mismo lugar".

Desde ese momento que anhelo volver a mi Tierra de Nunca Jamas, la cual nadie nos quitará jamás.
¡He descubierto nuestra Tierra de Nunca Jamas! Solo que aun no la he podido bautisar.